¿Revoltijo de números?

                                       Atenta petición, queridos lectores: VOTEN este domingo.
                                               Es nuestro derecho y es por nuestro querido México.

Consecuencia de un proceso de revisión a fondo, Major League Baseball decidió —con base en una serie de criterios— incorporar los números (y récords, por supuesto) de las Ligas Negras como si se tratara de las mismas Ligas Mayores.

Estamos en una época donde la inclusión y algunos valores sociales, vamos a decir, “antes no tan contemplados”, vienen a tomar una relevancia mucho más presente y visible. Particularmente el beisbol de máximo nivel sabe de la importancia de la incorporación de los peloteros afroamericanos en sus rosters, con aquella hoy ya lejana incursión del gran Jackie Robinson (Dodgers, 1947) como piedra angular de lo que vendría como una enorme aportación desde el gran rango atlético y tremenda entrega de estos peloteros con ejemplos abundantes.

En ese aspecto y con la actualidad, se ve como un acierto sumar las hazañas de los peloteros con aquellos equipos como los Kansas City Monarchs, los Homestead Grays, los Pittsburgh Crawfords, los New York Cubans y nada menos que esos innovadores y divertidos Indianapolis (Cincinnati) Clowns, algo como los Harlem Globetrotters de la pelota.

Los criterios, dicho por la misma información oficial de MLB, son para “corregir un error (histórico)” en cuanto a la oportunidad que perdieron esos grandes peloteros, como Cool Papa Bell, para mostrar sus grandes cualidades en MLB.

Hasta aquí, todo pareciera correcto… existe un PERO y la verdad es que se ve como una voz más fuerte, a pesar del gran trabajo de investigación histórica hecho por John Thorn y su equipo.

Amanecimos con Joshua Gibson como dueño de varios récords: bateó para .417 para una temporada de 39 juegos y no sabemos si será bien visto el superar así aquel paradigmático récord de Matt Williams, algo mexicano; bateó Josh para .372 de por vida, sobre los .367 de Ty Cobb, aunque Gibson bateó 808 imparables en su carrera en estas Ligas.

Aquí viene lo más MACIZO para los puristas, y agarren piedras porque… ¡superó en DOS departamentos a Babe Ruth! Gibson se quedó con .718 de slugging sobre .690 del Bambino y también le pegó en el OPS (embasamiento) al son de 1.167/1.164.

Acierto o error, la opinión es de cada quien, pero esto seguramente hará varias olas… no sabemos de qué tamaño. Hablando de inclusión y ruido, POR FIN se retira el ampáyer de origen cubano Ángel Hernández. Un buen tipo, pero unas pésimas evaluaciones recientes donde, la verdad, el beisbol estaba perdiendo y tardó mucho en reaccionar ante su bajo nivel… no cabe duda que la certeza es clave para lo que se decreta en un diamante de juego. ¿Cómo será el ampayeo en 10 años?

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