¡Que te vaya bonito!; Vicente Fernández recibió un último aplauso

CIUDAD DE MÉXICO. Vicente Fernández Gómez recibió un último aplauso de cuerpo presente en la Arena que construyó y que lleva su nombre, la VFG.

Sus familiares compartieron su dolor ante la muerte de El Charro de Huentitán. Su esposa, hijos y nietos abrieron la puerta al público y a los medios de comunicación, quienes esperaron durante horas para despedirse de su ídolo.

El homenaje ocurrió en el rancho Los Tres Potrillos, donde se ubica el recinto, en Tlajomulco de Zúñiga, Jalisco.

Ahí, con el cuerpo de su esposo a un lado, en un féretro adornado con un sombrero de charro y un arreglo de flores blancas, doña Cuquita, María del Refugio Abarca Villaseñor, escuchó Estos celos, dando palmadas al ataúd.

Doña Cuquita miraba fijamente el sombrero de su marido.

¡Cuquita, Cuquita, Cuquita!” resonó a coro en las más de 11 mil personas reunidas, como muestra de apoyo.

Enseguida, Alejandro Fernández, se acercó a su madre y cantó, mirándola a los ojos, con una voz salida de la entraña, Amor de los dos, junto al Mariachi Azteca.

La imagen conmovió a cada espectador, tanto a los presenciales como a quienes siguieron el homenaje a distancia. La ovación, el llanto, la música y el tributo a su legado y memoria se mezclaron en uno en aquellos minutos.

Coronas, flores blancas, crisantemos, una cruz con un gran Cristo a un lado, y una Virgen Guadalupana, al otro, y una bandera mexicana monumental, arroparon los restos de don Chente, mientras que la euforia de la gente acompañó la sentida despedida, no con silencio, sino con música, coreando sus temas emblemáticos.

La Arena VFG fue abierta desde las 17:00 horas de ayer y permanecería abierta toda la noche, hasta la despedida íntima, privada y familiar planeada para hoy a las 17:00 horas.

El público pudo así despedirse del último gallo de la música regional mexicana. Y en primera fila estuvo su ahora viuda, Cuquita, acompañada de sus nietos y sus hijos, Vicente, Gerardo, Alejandro y Alejandra.

Alejandro, Gerardo y Vicente fueron los primeros en montar guardia frente al féretro.

Diez minutos antes de las 19:00 horas ingresó el féretro, cargado en hombros del Mariachi Azteca que lo acompañó en sus conciertos y que le cantó entre llanto El rey, como inicio del homenaje, en el que el público aplaudió y cantó con ellos como un coro monumental.

Lo mismo hicieron sus seguidores con las siguientes canciones que recordaron la inigualable interpretación de Vicente Fernández: México lindo y querido, Hermoso cariño y Acá
entre nos.

En guardia, sus hijos Vicente, Alejandro y Gerardo, sus amigos los mariachis y para el tema Urge, la guardia de su hija Alejandra, de sus nietas.

Los violines, las guitarras y el guitarrón continuaron su repertorio: El último beso, Las llaves de mi alma, Por tu maldito amor, De un rancho a otro y La derrota. La gente coreaba cada tema, con los celulares encendidos; el sentimiento de haberlo conocido, de escucharlo alguna vez.

Siguieron De qué manera te olvido y El andariego, mientras sus escoltas, los encargados de su seguridad, Juanjo y Chuy, le hicieron guardia.

Bien fuerte y cariñoso el aplauso, con un grito. La siguiente era la canción con la que despedía sus shows”, así retumbó Volver, volver. Mientras tanto, los cantantes Ángela, Leonardo y Pepe Aguilar, así como su esposa Aneliz Álvarez Alcalá, hicieron guardia.

Pepe Aguilar, de otra dinastía de música vernácula, los Aguilar, se acercó entonces a ofrecerle sus condolencias a Alejandro Fernández y a la familia de don Chente.

Otro mariachi, el Nuevo Tecalitlán, subió al escenario y sonaron El jalisciense, El rey —cuya última frase finalizaron con “¡Y Vicente es el rey!”—, Mujeres divinas, Perdón —con la guardia de dos policías—, México lindo y querido, Hermoso cariño, Le pese a quien le pese y Estado civil.

Los Aguilar también acudieron.

Con tal música de fondo, minutos antes de las 20 horas del domingo, el público, pudo pasar frente al escenario para ver de cerca el féretro de Vicente Fernández y su familia.

Con La migra, sus nietos Alex, Camila, América, Emiliano y Valentina Fernández, hijos de Alejandro, rindieron honor a su abuelo. Mientras tanto, su padre, acompañado por su actual novia, la modelo e influencer Karla Laveaga, estuvo atento al homenaje a don Vicente.

Al conocerse la muerte del cantante, sus fans comenzaron a llegar afuera del rancho y a reunirse afuera de la Arena VFG.

Después de las 16:00 horas, los fans comenzaron a entrar a la Arena. Una vez llena y durante el homenaje, su público comenzó a pasar en unifila frente al féretro.

-Con información de Karla Méndez / Corresponsal

cva

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